
Estos resultados son especialmente alentadores para los pacientes de cáncer de pulmón ya que ambos fármacos están aprobados para el uso en otros tipos tumorales, facilitando su incorporación en ensayos clínicos, que se planean comenzar próximamente. Además será interesante ver el efecto terapéutico de estos inhibidores en otros tumores con alta dependencia en el oncogén Kras, como puede ser el cáncer pancreático.