
Como consecuencia, las alteraciones en la expresión de los reguladores de la estabilidad de la cromatina, o reguladores epigenéticos, tienen una función crucial en el cáncer donde ejercen un papel activo en la iniciación y en la progresión del mismo.
Se han desarrollado pequeñas moléculas diseñadas para inhibir las proteínas responsables de las modificaciones epigenéticas. Estas se encuentran en distintas fases de desarrollo pero los prometedores resultados preclínicos de los inhibidores de BRD4 nos acercan hacia una nueva era en las terapias epigenéticas antitumorales.
Tet es una de las enzimas responsables de regular el estado de la cromatina, estableciendo modificaciones químicas en el ADN que alteran la estructura de la misma. La función de las proteínas Tet ha cobrado importancia en los últimos años por su implicación directa en el mantenimiento del estado multipotencial de las células madre, su implicación en la embriogénesis y en el cáncer. Recientemente el laboratorio del Dr. Cheng ha conseguido descifrar el enigma de la estructura de la proteína, este hallazgo es un hito en la historia de la epigenética ya que ha permitido identificar el mecanismo de acción de la misma y posibilita el diseño de nuevos fármacos que bloqueen su actividad.
El tratamiento con inhibidores de los reguladores epigenéticos podría tener una alta importancia en el tratamiento oncológico y especialmente en el de las leucemias, donde está frecuentemente alterado el patrón epigenético del genoma, pero se necesitan más investigaciones en este campo para identificar protocolos seguros para su uso en la clínica.